The 40 or so muscles in the human face can be activated in different combinations to create thousands of expressions. But do these expressions look the same and communicate the same meaning around the world, regardless of culture? Is one person’s smile another’s grimace?
Nuestros músculos faciales son 40, o más, y se mueven y combinan de distintos modos para crear miles de expresiones. Pero ¿estas expresiones tienen el mismo aspecto y comunican el mismo significado en todo el mundo, cualquiera sea la cultura? ¿Puede la sonrisa de una persona ser una mueca de disgusto en otra?
Charles Darwin theorized that emotional expression was a common human feature. But he was in the minority. Until the mid-20th century, many researchers believed that the specific ways we show emotion were learned behaviors that varied across cultures. Personality theorist Silvan Tomkins was one of the few to insist otherwise. Tomkins claimed that certain affects— emotional states and their associated facial expressions— were universal.
Charles Darwin postuló que la expresión emocional era una característica humana compartida. Pero él fue parte de una minoría. Hasta mediados del siglo XX, muchos investigadores creían que las formas específicas de manifestar una emoción eran comportamientos aprendidos que variaban entre culturas. Silvan Tomkins, especialista en personalidad, fue de los pocos que sostuvo lo contrario. Tomkins afirmaba que ciertos sentimientos --los estados emocionales y sus respectivas expresiones faciales-- eran universales.
In the 1960s, psychologist Paul Ekman set about testing this theory by examining hundreds of hours of film footage of remote tribes isolated from the modern world. Ekman found the native peoples’ expressions to be not only familiar, but occurring in precisely the situations he would expect. Conversely, he ran tests with tribes who had no prior exposure to Western culture. They were able to correctly match photos of different facial expressions with stories designed to trigger particular feelings. Over the next few decades, further research has corroborated Darwin’s idea that some of our most important emotional expressions are in fact universal. The degrees of expression appropriate to a given situation can, however, vary greatly across cultures.
En la década de 1960, el psicólogo Paul Ekman puso a prueba esta teoría examinando filmaciones de cientos de horas sobre tribus remotas que vivían aisladas del mundo moderno. Ekman descubrió que las expresiones de los nativos no solo eran familiares, sino que ocurrían exactamente en las situaciones esperadas. Por otro lado, hizo pruebas con tribus sin previa exposición a la cultura occidental. Pudieron hacer coincidir las fotos de diferentes expresiones faciales con historias diseñadas para desencadenar sentimientos particulares. En las décadas siguientes, otras investigaciones corroboraron la idea de Darwin sobre la universalidad de algunas de las expresiones emocionales más importantes. Sin embargo, los grados de una expresión asociada a una situación particular pueden variar notablemente de una cultura a otra.
For instance, researchers have studied facial expression in people who are born blind, hypothesizing that if expressions are universal, they would be displayed in the same way as sighted people. In one study, both blind and sighted athletes displayed the same expressions of emotion when winning or losing their matches.
Por ejemplo, los investigadores estudiaron la expresión facial en personas que nacen ciegas, bajo la hipótesis de que si las expresiones son universales, se mostrarían de la misma manera que en las personas videntes. Un estudio realizado con atletas ciegos y videntes demostró que ambos expresaban las mismas emociones al ganar o perder partidos.
Further evidence can be found in our evolutionary relatives. Comparisons of facial expression between humans and non-human mammals have found similarities in the structure and movement of facial muscles. Chimpanzee laughter looks different from ours, but uses some of the same muscle movements.
Nuestros parientes en la evolución pueden brindarnos más evidencias. Comparaciones entre la expresión facial de humanos y mamíferos no humanos arrojaron similitudes en la estructura y el movimiento de los músculos faciales. Si bien la risa del chimpancé es distinta a la nuestra, algunos de sus movimientos musculares son los mismos.
Back in the 60s, Ekman identified six core expressions. Anger is accompanied by lowered eyebrows drawn together, tense and narrowed eyes, and tight lips; disgust, by the lips pulled up and the nose crinkling. In fear, the upper white of the eyes are revealed as the eyebrows raise and the mouth stretches open, while surprise looks similar, but with rounded eyebrows and relaxed lips. Sadness is indicated by the inner corners of the eyebrows being drawn inwards and upwards, drooping eyes, and a downturned mouth. And of course there’s happiness: lips drawn up and back, and raised cheeks causing wrinkling around the eyes. More recently, researchers have proposed additional entries such as contempt, shame, and disapproval, but opinions vary on how distinct boundaries between these categories can be drawn.
Allá por los años 60, Ekman identificó seis expresiones básicas. La ira se manifiesta con el entrecejo fruncido, ojos tensos y entrecerrados, y labios apretados; el disgusto, con los labios levantados y la nariz fruncida; el miedo, con las cejas levantadas, el banco del ojo al descubierto y la boca entreabierta. La sorpresa, por su parte, es similar, pero con las cejas arqueadas y los labios relajados. La tristeza se manifiesta con las esquinas internas de las cejas arqueadas hacia adentro y hacia arriba, con ojos caídos y labios hacia abajo. Y, por supuesto, también expresamos felicidad: labios inclinados hacia arriba y hacia atrás, y mejillas levantadas que forman arrugas alrededor de los ojos. Hace poco, los investigadores han propuesto nuevas expresiones como el desprecio, la vergüenza, y la desaprobación, pero las opiniones están divididas en cuanto a las diferencias entre estas categorías.
So if Ekman and other researchers are correct, what makes certain expressions universal? And why are they expressed in these particular ways? Scientists have a lot of theories rooted in our evolutionary history. One is that certain expressions are important for survival. Fear and surprise could signal to others an immediate danger. Studies of humans and some other primates have found that we pay more attention to faces that signal threats over neutral faces, particularly when we’re already on high alert.
Entonces, si Ekman y otros investigadores están en lo correcto, ¿qué hace que ciertas expresiones sean universales? ¿Y por qué se expresan de estas maneras tan particulares? Los científicos esgrimen muchas teorías basadas en nuestra historia evolutiva. Una es que ciertas expresiones son importantes para la supervivencia. El miedo y la sorpresa podrían advertir a otros de un peligro inmediato. Estudios realizados en humanos y otros primates revelaron que prestamos más atención a rostros que señalan amenazas que a rostros neutrales, particularmente cuando ya estamos en alerta máxima.
Expressions also could help improve group fitness by communicating our internal states to those around us. Sadness, for example, signals to the group that something’s wrong. There’s some evidence that expressions might be even more directly linked to our physiology. The fear expression, for instance, could directly improve survival in potentially dangerous situations by letting our eyes absorb more light and our lungs take in more air, preparing us to fight or flee.
Las expresiones también ayudarían a mejorar las relaciones grupales al comunicar nuestros estados de ánimo a quienes nos rodean. La tristeza, por ejemplo, le indica al grupo que algo anda mal. Hay evidencia de que las expresiones podrían tener relación directa incluso con nuestra fisiología. La expresión de miedo, por ejemplo, podría mejorar francamente la superviviencia en situaciones potencialmente peligrosas permitiendo a los ojos absorber más luz y a los pulmones tomar más aire, preparándonos para luchar o huir.
There’s still much research to be done in understanding emotional expression, particularly as we learn more about the inner workings of the brain. But if you ever find yourself among strangers in a strange land, a friendly smile could go a long way.
Todavía queda mucho por investigar para comprender la expresión emocional, en particular conforme más sabemos sobre el funcionamiento interno del cerebro. Pero si alguna vez te encuentras entre extraños en una tierra extraña, una sonrisa amistosa podría ser tu mejor recurso.