Since 1997, researchers at the University of Sussex have monitored global trends in armed conflict. Their research clearly shows that in Africa, over the last 10 years, armed conflict has gone up by sevenfold. Let's think about that: sevenfold in a single decade. Why is this?
Desde 1997, los investigadores de la Universidad de Sussex monitorizan las tendencias globales en los conflictos armados. Esta investigación demuestra claramente que en África, en los últimos 10 años, los conflictos armados se han multiplicado por siete. Pensemos en ello: se han septuplicado en una sola década. ¿Por qué?
We believe, as oxygen is to fire, so are unemployed youth to insecurity. We have a lot of youth on this continent. Youth like Sandra, who, on a Saturday morning in March 2014, woke up excited at the prospects of getting a coveted job at the Nigerian Immigration Services. She kissed her daughter goodbye, left her home, never to return. Sandra and 15 other young Nigerians died that day, applying for a job, in the ensuing stampede, as tens of thousands of people applied for a few thousand open positions.
Así como el oxígeno va de la mano del fuego, los jóvenes desempleados van de la mano de la inseguridad. Hay una gran cantidad de jóvenes en este continente. Jóvenes como Sandra, que un sábado por la mañana, en marzo de 2014, se levantó emocionada por la posibilidad de conseguir un trabajo muy deseado en el Servicio de Inmigración de Nigeria. Se despidió de su hija con un beso, salió de su casa y nunca volvió. Sandra y otros 15 jóvenes nigerianos murieron ese día, por buscar un trabajo, aplastados por una estampida cuando decenas de miles de personas se presentaban a unas pocas miles de vacantes.
In the last 20 years, 20 million youth have entered the Nigerian workforce alone. Today, half our population is under the age of 18. That's almost 80 million people that will be entering the workforce in the next 20 years. My friends, if a wave of 20 million people entering the workforce triggered Niger Delta crisis, Fulani herdsmen crisis and Boko Haram, I ask you: What will four times that number do?
En los últimos 20 años, 20 millones de jóvenes entraron en el mercado laboral. Hoy, la mitad de nuestra población tiene menos de 18 años. Eso representa casi 80 millones de personas que entrarán al mercado laboral en los próximos 20 años. Amigos, si una oleada de 20 millones de personas que ingresaron al mercado laboral desencadenó la crisis del Delta del Níger, la crisis de los pastores fulani y Boko Haram, les pregunto: ¿qué pasaría si ese número fuera cuatro veces mayor?
To do my part to solve this challenge, in 2012, I moved to a small village in northern Nigeria, in the center of the area most recently hit by the spread of insecurity, brutal bombings and searing poverty, with an idea: Could we create an economic buffer to halt the spread of this insecurity, by unlocking the power of agriculture as a job-creation engine?
Para contribuir a resolver este reto, en 2012 me mudé a un pequeño pueblo del norte de Nigeria, al centro de la zona más afectada hasta ese momento por la inseguridad, los bombardeos brutales y la pobreza extrema, con una idea: ¿podríamos crear una reserva económica para detener la inseguridad, utilizando el poder de la agricultura como motor para generar empleo?
We knew this had been done before in countries like Thailand, where, in 1980, they suffered from the same economic challenges as us. Today, however, Thailand produces two million cars a year -- more than the United Kingdom -- with over 30 percent of its workforce as highly commercial, profitable small farmers, with an unemployment rate of less than one percent. How did they do this? In the 80s, Thailand dramatically improved the productivity of its small farmers, ensuring that it was able to start to dominate export markets for produce. Building on this strength, they attracted investment and started to process, being able to export higher-value products like starch from cassava. Finally, coupled with investment in education, they started to expand to even higher-value manufacturing. To make our idea a reality and follow a path similar to Thailand, we knew that we would have to sell young farmers on farming.
Sabíamos que esto se había hecho antes en países como Tailandia, donde en 1980 sufrieron las mismas dificultades económicas que nosotros. Hoy, sin embargo, Tailandia produce dos millones de coches al año, más que el Reino Unido, con una mano de obra superior al 30 % integrada por pequeños agricultores que logran una alta rentabilidad, y con una tasa de desempleo menor al 1 %. ¿Cómo lo hicieron? En los 80, Tailandia mejoró drásticamente la productividad de pequeños agricultores, asegurándose de empezar a dominar el mercado de exportación de productos agrícolas. Aprovechando esta fortaleza, atrajeron inversiones, empezaron a procesar y exportaron productos de gran valor, como la fécula de mandioca. Finalmente, junto con inversión en educación, comenzaron a expandirse y a fabricar productos de más valor. Para materializar nuestra idea y seguir un camino similar al de Tailandia, sabíamos que tendríamos que atraer jóvenes granjeros con la agricultura.
A young man in northern Nigeria, for the purpose of today's discussion, we'll call "Saminu," made it very clear to me that this would not be easy. Saminu grew up in a beautiful village in northern Nigeria. And he tells wondrous stories of playing for hours with his friends, running up and down the beautiful rock formations that dot the countryside around his home. Despite this beauty, Saminu knew that the first chance he got, he would leave. He did not want to be a farmer. Growing up, he saw his parents work so hard as farmers, but barely get by. As he says, they had "babu" -- nothing.
Un joven del norte de Nigeria, a quien llamaremos Saminu, me dejó muy claro que no sería fácil. Saminu creció en un bello pueblo del norte de Nigeria. Y contaba de su maravillosa infancia, cuando jugaba horas con amigos, subiendo y bajando las bellas formaciones rocosas que salpicaban el campo cerca de su casa. A pesar de esta belleza, Saminu sabía que, ante la primera oportunidad, se marcharía. No quería ser agricultor. De niño, vio a sus padres trabajar muy duro como granjeros, pero apenas sobrevivían. Y, como él decía, tenían "babu"... y nada.
Young farmers like Saminu do not have access to the cash to buy the farming products to pair with their hard work to be successful. When their meager harvest came in, desperate for cash, they would sell most of it at fire-sale prices, when, if they could just wait six months, they could get 50 percent more. Hence, Saminu left to the city, where he soon realized that life was not easy. He borrowed a very old motorcycle, with tires that were more patches than tires, to become a motorcycle taxi driver. He lived in constant fear every day that his precious, tattered motorcycle would be ripped away from him, as it had before. But he got it back, thankfully. He knew of others, however, who were not so lucky -- other young men who, once they'd lost their motorcycles, became destitute. Angry, these young men set out to wreak vengeance on a society that they believed had turned its back on them. Saminu told me that they joined insurgent groups, often acting as getaway drivers in bombings and kidnappings.
Los granjeros jóvenes como Saminu no tienen acceso al dinero para comprar productos agrícolas que les permitan salir adelante con tan arduo trabajo. Cuando llega la época de la magra cosecha, desesperados por conseguir dinero, venden casi todo a precio de liquidación, cuando, si esperaran seis meses, podrían obtener un 50 % más. Por eso, Saminu se fue a la ciudad, donde pronto descubrió que la vida no era fácil. Tomó prestada una moto muy vieja, con neumáticos que eran más parches que neumáticos, para trabajar como conductor de una mototaxi. Vivía con el temor permanente, día tras día, de que le quitaran su valiosa y desvencijada moto, como ya le había pasado. Pero, afortunadamente, la recuperó. Pero sabía que otros no habían tenido tanta suerte, otros jóvenes que, una vez privados de sus motos, quedaron sin recursos. Enfadados, estos jóvenes se embarcaron en una venganza contra una sociedad que, según ellos, les había dado la espalda. Saminu me dijo que se habían unido a grupos insurgentes, a menudo convirtiéndose en conductores de huida en bombardeos y secuestros.
To end this cycle of insecurity, we must make farming a viable choice. We must ensure that these young men, on their small farms, can earn enough money to make a life for themselves; to make a future. The question now is how. Recognizing that Africa has grassroot-level leadership, we simply developed a model to bring the professional management and investment to scale to these grassroot leaders. We called it "Babban Gona" -- "great farm" in Hausa.
Para acabar con este ciclo de inseguridad, debemos convertir la agricultura en una opción viable. Debemos asegurarnos de que estos jóvenes puedan, en sus pequeñas granjas, ganar dinero suficiente para ganarse la vida por sí mismos, para labrarse un futuro. La pregunta es cómo. Sabiendo que África tiene liderazgos populares, simplemente desarrollamos un modelo para empoderar a estos líderes de raíces populares con gestión profesional e inversión. Lo llamamos "Babban Gona", o "gran granja" en idioma hausa.
Upon reaching the village in 2012, I traveled from community to community, trying to convince people of our idea, trying to recruit farmer members. We failed woefully that first year, barely recruiting 100 brave souls. But we persevered. We kept doing what we promised, slowly we gained their trust. More farmers joined us. Fast-forward now five years. With a passionate and committed team and the tremendous support of our partners, we grew dramatically, today, serving 20,000 small farmers, enabling them to double their yields and triple their net income relative to their peers. We are very proud of the fact --
Al llegar al pueblo en 2012, viajé de comunidad en comunidad, intentando convencer a la gente con nuestra idea, intentando reclutar granjeros. Desgraciadamente, ese primer año fracasamos, pues apenas reclutamos a 100 valientes. Pero insistimos. Seguimos haciendo lo que prometimos, ganando poco a poco su confianza. Se unieron más granjeros. Ahora retrocedamos cinco años. Con un equipo apasionado y comprometido y el enorme apoyo de nuestros compañeros, crecimos exponencialmente. Y hoy ayudamos a 20 000 pequeños granjeros, permitiéndoles duplicar sus cosechas y triplicar sus ingresos netos en comparación con sus pares. Estamos muy orgullosos del hecho...
(Applause)
(Aplausos)
Fast-forward three years, Saminu has earned enough money to buy three goats for his mother to start a goat-rearing business, owns his own retail store and bought not one, but two motorcycles, with vanity license plates: "Babban Gona."
Volvamos a tres años atrás. Saminu ganó suficiente dinero y compró tres cabras a su madre para que empiece su negocio con la crianza de estos animales, tiene su propia tienda minorista y se compró no una, sino dos motos, con las matrículas personalizadas de "Babban Gona".
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(Aplausos)
My friends, in the next 20 years, over 400 million Saminus are entering the African workforce, with potentially half of them having opportunities in agriculture. To unlock these opportunities, through models similar to ours, they would require 150 billion dollars a year in financing. This is a big number. But if we can tap into commercial debt, it is a small number -- only 0.1 percent of all the debt in the world today, 10 cents out of every 100 dollars. This is why we designed our model to be very different from conventional agricultural development programs. In a few short years, we have shown that our model works, is high-impact and can turn a profit, attracting commercial investors that do not typically invest in small farmers in Africa.
Amigos, en los próximos 20 años, más de 400 millones de jóvenes como Saminus ingresarán al mercado laboral de África y la mitad de ellos tienen la oportunidad potencial de trabajar en la agricultura. Para aprovechar estas oportunidades a través de modelos parecidos al nuestro, se necesitarían USD 150 mil millones de financiación cada año. Es un número muy alto. Pero si consideramos la deuda comercial, es un número pequeño, solo el 0,1 % de toda la deuda mundial en la actualidad, 10 centavos de cada USD 100. Por eso diseñamos nuestro modelo, para distinguirnos de los programas convencionales de desarrollo agrícola. En pocos años, demostraremos que nuestro modelo funciona, que tendrá gran impacto y que puede ser redituable, y así atraerá a inversores comerciales que nunca habían invertido en pequeños granjeros en África.
Imagine a world where millions of young men across Africa, hardworking young men, have other options. I know these driven, ambitious young men will make the right choice. We can realize this dream if they have a choice.
Imaginen un mundo en el que millones de jóvenes en toda África, jóvenes trabajadores, tengan otras opciones. Sé que estos jóvenes motivados y ambiciosos harán la elección correcta. Podemos cumplir este sueño si tienen una opción.
Thank you.
Gracias.
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(Aplausos)