Predecir el futuro es algo que nos apasiona y a lo que solemos dedicar bastante tiempo e imaginación. Sin embargo, es algo que en general se nos da fatal. Los motivos son varios: visión sesgada de la realidad (los universos paralelos), interacción con la realidad al observarla, falta de visión global... Por eso, mi propuesta es dejar de jugar a ser adivinos y directamente crear el futuro. Nunca antes el futuro fue tan inmediato y nunca antes tuvimos la capacidad que hoy tenemos para influir en el futuro, para crearlo. Yo lo he hecho desde el emprendimiento y la tecnología: he creado la medida de seguridad del futuro para proteger los billetes del futuro, y he cambiado el concepto del correo electrónico para darle una nueva vida a las comunicaciones digitales. Desde mi experiencia emprendedora propondré las claves para dejar de predecir el futuro y pasar a crearlo.