A ring with supernatural abilities tempts its beholder with power. But there are no hobbits, dwarves, or Valkyries in this tale. In fact, the legend of the Ring of Gyges appeared long before those characters were ever committed to paper: more than 2,000 years ago, in the Greek philosopher Plato’s “Republic.” The story surfaces as the philosopher, Socrates, and his student, Glaucon, discuss why people act justly. Is it because it’s what’s right? Or because it’s a convention that’s enforced through punishment and reward? Playing devil’s advocate, Glaucon argues against Socrates and recounts the following story...
Un anillo con habilidades sobrenaturales que tienta a su portador con poder. Pero no hay hobbits, enanos o valquirias en esta historia. De hecho, la leyenda del anillo de Giges surgió mucho antes de que estos personajes aparecieran en papel: Hace más de 2000 años, En “República” del filósofo griego Platón. La historia empieza cuando el filósofo Sócrates, y su estudiante, Glaucón, discuten por qué la gente actúa con justicia. ¿Es porque es lo correcto? ¿O porque es una convención impuesta mediante castigos y recompensas? Haciendo de abogado del diablo, Glaucón debate con Sócrates y cuenta la siguiente historia...
Long ago, a shepherd named Gyges was tending his flock when an earthquake struck, ripping an opening to the ground. The chasm drew Gyges in. There, his eyes alighted upon a bronze horse, the doors to its central chamber ajar. Peering inside, Gyges discovered the corpse of a giant. On its finger, a golden ring, which Gyges pocketed before retracing his steps. Later, he sat among the other shepherds, fiddling with the mysterious ring when, suddenly, after absentmindedly twirling its stone, he became invisible. When he turned the stone back in the opposite direction, he reappeared. Emboldened by the ring’s powers, new possibilities bloomed before him, and a sordid plan hatched in his mind. Gyges became a messenger to the king of Lydia, and, inside the palace, used the ring to prowl undetected. He seduced the queen and convinced her to betray her husband. And soon Gyges, once a humble shepherd, had murdered the monarch and claimed the kingdom.
Hace mucho tiempo, un pastor llamado Giges estaba cuidando su rebaño cuando ocurrió un terremoto que abrió un hueco en la tierra. El abismo atrajo a Giges. Allí, sus ojos se posaron ante un caballo de bronce, las puertas a su cámara central entreabiertas. Al mirar dentro, descubrió el cadáver de un gigante. En su dedo, un anillo de oro, el cual Giges tomó antes de volver. Luego, se sentó con los otros pastores, jugueteando con el misterioso anillo cuando, de repente, luego de girar distraídamente su piedra, se volvió invisible. Cuando la giró en dirección opuesta, reapareció. Envalentonado por los poderes del anillo, se le presentaron nuevas posibilidades, y un sórdido plan se gestó en su mente. Giges se volvió un mensajero del rey de Lidia, y, dentro del palacio, usó el anillo para merodear desapercibido. Sedujo a la reina y la convenció de traicionar a su esposo. Y pronto Giges, el humilde pastor, asesinó al monarca y reclamó el reino.
Glaucon tells this story to illustrate how people can apparently benefit by acting unjustly. After all, wouldn’t any rational person act like Gyges if presented the opportunity to get what they desired without consequence?
Glaucón cuenta esta historia para ilustrar como las personas pueden aparentemente beneficiarse actuando de modo injusto. Después de todo, ¿no actuaría como Giges cualquier persona racional si se le presentase la oportunidad de conseguir lo que desea sin consecuencias?
Exploring this argument, Glaucon breaks all good things into three classes. The first kinds, we desire for their own sake, like the experience of harmless pleasure. The second, we want only for the value they bring, though they may be onerous, like exercise or medicine. The third class comprises things we desire for their own sake and the value they offer, like knowledge and health. Glaucon argues that justice belongs to the second class of good: it’s a burden that nevertheless brings rewards. The only reason anyone conducts themselves virtuously, he reasons, is due to external influences. So it’s appearing— not actually being— virtuous that matters.
Explorando este argumento, Glaucón divide todos los bienes en tres clases. Los primeros, los deseamos por sí mismos, como la experiencia del placer inofensivo. Los segundos, los queremos solo por el valor que generan, aunque sean onerosos, como el ejercicio o la medicina. Los terceros se componen de cosas que deseamos tanto por sí mismos como por el valor que ofrecen, como el conocimiento y la salud. Glaucón afirma que la justicia pertenece a la segunda clase de bien: Es una carga que, sin embargo, genera recompensas. Él razona que el único motivo por el que alguien se comporta virtuosamente, es debido a influencias externas. Entonces es aparentar -no ser- virtuoso lo que importa
Socrates, as written by Plato, disagrees, countering that justice belongs to the third class of good, offering both extrinsic and intrinsic benefits. Socrates argues that the human soul has three parts: reason, spirit, and appetite. Reason guides an individual to truth and knowledge, and is influenced by either spirit or appetite. Spirit is righteous, ambitious, and the source of bold action, while appetite consists of baser, bodily desires.
Sócrates, según Platón, no está de acuerdo. Responde que la justicia pertenece a la tercera clase de bien, que ofrece beneficios tanto extrínsecos como intrínsecos. Sostiene que el alma humana tiene tres partes: Razón, espíritu y apetito. La razón guía al individuo hacia la verdad y al conocimiento, y es influenciada por el espíritu o el apetito. El espíritu es justo, ambicioso y el origen de las acciones audaces, mientras que el apetito consiste de deseos más bajos y corporales.
To Socrates, the philosopher is led by reason, and their spirit keeps their appetite in check, making them the most just and the happiest. Even without consequences for self-serving wrongdoings, they wouldn't commit them. Meanwhile, the tyrant succumbs to appetite and acts unjustly. So, while Gyges may have attained power and wealth, Socrates implies that his soul would be in disharmony. He’d be enslaved to his own base desires rather than guided by reason and wouldn't be truly happy.
Para Sócrates, el filósofo se guía por la razón, y su espíritu mantiene al apetito bajo control, Haciéndolos los más justos y felices. Incluso sin las consecuencias, no cometerían actos viles y egoístas. Mientras tanto, el tirano sucumbe al apetito y actúa injustamente. Así que, mientras Giges puede haber conseguido poder y riquezas, Sócrates insinúa que su alma estaría en discordia. Esclavizado por sus deseos básicos en lugar de ser guiado por la razón y no sería verdaderamente feliz.
Before Plato penned this discussion, Chinese philosopher Confucius similarly reasoned that by simply acting justly, one also benefits oneself. After, modern Western philosophers voiced varying beliefs. Thomas Hobbes, for instance, argued that the state of nature is violent and selfish. Justice, therefore, is imposed by authority. John Locke, in contrast, asserted that people are naturally obligated to act justly and they agree to participate in civil society to secure their natural rights.
Antes de que Platón escribiese este debate, el filósofo chino Confucio, razonó que simplemente actuando con justicia, también se beneficia uno mismo. Después, filósofos occidentales modernos expresaron creencias varias. Thomas Hobbes, por ejemplo, argumentó que el estado de la naturaleza es violento y egoísta. Por lo tanto, la justicia debe imponerla la autoridad. Por el contrario, John Locke afirmó que las personas están obligadas a ser justas por naturaleza y aceptan participar en la sociedad civil para garantizar sus derechos naturales.
The allegory of the ill-gotten magical ring that lures its wearer towards their darkest desires continues to inspire. So if the ring of Gyges fell into your hands, what would you do?
La alegoría del anillo mágico mal habido que atrae a su portador hacia sus deseos más oscuros continúa inspirando. Así que, si el anillo de Giges cayese en sus manos, ¿qué harías?